Lo mejor de lo imposible es que existe un punto exacto en el espacio en el que puede pasar a ser posible, sólo hay que encontrar cuál es ese punto.
Un cuerpo, una silla, una escalera, una cuerda, un globo, dos palitos, una aguja, un frasquito con jabón, una escoba, un arnés y dos mosquetones.
Esta obra se hizo con el apoyo de Iberescena 2016 para Creación en Residencia y Kulturreferat Landeshauptstadt, Múnich, Alemania, Fundación Lusofonia y Plataforma PlusBrasil en el marco de la Residencia Villa Waldberta 2016.